Julian Apaza más conocido como su seudónimo Tupac Katari fue un indígena de la tribu Aymara que lideró un levantamiento contra las autorizaciones coloniales en el Alto Perú, junto a su esposa y heroína Bartolina Sisa luego de enterarse, a lo largo de su vida, los maltratos y abusos que sufre el pueblo Aymara y Quichwa.
Los españoles obligan a los indios a trabajar sin pago y sin horario en sus fincas o minas (en su mayoría mujeres y niños). Muchos mueren lejos de sus familias, sin alimento, ni esperanza.
Está situación llevó a que Juan Apaza decidiera una rebelión contra las autoridades del Alto Perú.
Como parte del levantamiento, Túpac Katari formó un ejército de cuarenta mil hombres y cercó a la ciudad de Chuquiago, dos veces, pero las tropas enviadas para sofocar la rebelión consiguieron romper el primer cerco. Un segundo sitio se produce el 15 de agosto, para ese entonces había llegado Andrés Tupac Amaru, sobrino de José Gabriel Condorcanqui, líder de la rebelión Inca en Perú, para apoyar a los rebeldes, pero maniobras políticas y militares, así como líderes originarios contrarios al levantamiento acabaron con el mismo.
Desafortunadamente luego de que Tupac Katari de dirigiera hacia el lago Titicaca para reorganizar sus fuerzas fue detenido por los españoles. Katari es conducido hasta Achachicala; rapado y con una corona de espinas fue paseado y expuesto.
Fue torturado y sometido a juicio sumario. Siendo el 13 de noviembre sentenciado a muerte.
El día de hoy, 15 de noviembre, en Peñas, se llevó a cabo su ejecución. Primero le cortaron la lengua y después lo descuartizaron haciendo que varios caballos tirasen de él en varias direcciones. Antes que le cortaran la lengua dijo: ”A mí solo me mataréis, pero mañana volveré y seré millones”; En picotas se pueden ver todavía los trozos de su cuerpo mutilado.